Palabras clave: Rumiñahuí, cultura, preexistencias, comercio, espacio público.
La arquitectura es el arte de sintetizar. Este proyecto, aparentemente simple, logra integrar un programa diverso dentro de las formas puras de un círculo y un cuadrado, unificando 7 edificaciones existentes y 10 predios en un solo concepto arquitectónico.
A partir de una profunda investigación teórica y socioespacial, el diseño responde a la dinámica comercial del sector y reinterpreta la arquitectura periférica con un enfoque innovador. La propuesta trasciende lo convencional, convirtiéndose en una infraestructura de activación social y cultural que transforma el entorno.
El proyecto se compone de múltiples elementos estratégicos: una superplaza, un friso de comunicación, una torre de circulación, un mirador público, aleros con paneles solares, una planta baja libre con topografía variada, y más. Inspirado en referentes como el Fun Palace de Cedric Price y el Condensador Público 24 de Mayo en São Paulo, este proyecto adapta esas ideas a la realidad ecuatoriana, creando un espacio memorable y funcional para la comunidad.
¨La capacidad de lo ordinario de volverse extraordinario en virtud de su escrutinio y hallazgos constituye posteriormente la premisa del deambular surrealista y la deriva situacioncita. Mediante encuentros fortuitos o desvíos deliberados, sus excursiones se proponen desvelar una ciudad potencial, en la ciudad existente, la playa bajo los adoquines. ¨
-Enrique Walker-